HISTORIA ¿FORMATIVA?

Desde hace mucho tiempo, en la secundaria me preguntaba si aprender historia era importante.

Tenía la idea de que era ir en retroceso, me preguntaba ¿Para qué? para que aprenderme fechas y nombres de hombres y lugares que al salir ya tenía olvidados? La historia no fue entonces significativa para mí, sin embargo, aunque ahora he leído que la historia es la herramienta intelectual más poderosa que posee la sociedad  y que su finalidad  es explicar el presente, decir por qué el mundo que nos rodea es como es. 

     

 Que la historia  nos hace ver qué es importante en nuestro mundo, y cómo ha llegado a serlo. Nos cuenta por qué las cosas que valoramos son las cosas que debemos valorar,  considero que eso tiene el poder de definir a toda una sociedad ya que el futuro depende del pasado.

Sin embargo sigo pensando que la forma en que yo aprendí la historia no era más que un sistema de almacenamiento memorístico.

Hace poco tuve la suerte de recibir un curso de historia que nos impartió el maestro Guadalupe Dávila  Jefe del Centro de Maestros Mante  y mi concepción de historia como aprendizaje formativo cambió totalmente.

Aprendimos a hacer un blog, y en él escribimos algo sobre historia, yo escogí hacer la investigación sobre un maestro pintor que vivió en ciudad Mante mucho tiempo y que ya falleció.

El era del estado de Veracruz, pero llegó a nuestras hermosas tierras y ya no se fue. Pintor de hermosos murales y de bellas cuadros regionales, con una conducta llena de valores y con un alma apacible y sencilla fue para mí ejemplo de vida y  me inculcó el amor al arte.

Para mí fue apasionante hablar con su nieta y escucharla platicar de  situaciones que vivió con su abuelo. Me enteré que tenía un libro sobre Valle Nacional, donde describe los horrores de ese campo de concentración mexicano establecido en la época de Don Porfirio Díaz  y pude leerlo.

Hoy comparto con ustedes algo de lo que he escrito  e investigado, algunos de sus cuadros y murales  y la experiencia de que hacer historia,  no de  escucharla es aprender a reflexionar,  a analizar los sucesos y a ser críticos.

Todo conocimiento es apasionante, pero si tú participas en su construcción,  entonces te estás formando como ser humano que aprende a aprender,  que aprende a ser y que aprende a convivir.